No se acordaba de lo que era ganar, la sensación de triunfo la habíamos olvidado. Teníamos la sensación que los de al frente vienen sintiendo hace más de 8 años. Oriente no ganaba desde hacía cinco fechas y desde aquella goleada a día de hoy las cosas habían cambiado demasiado. El equipo se quedó sin técnico, sin posibilidades a pelear el título y comprometido con la clasificación a la Copa Libertadores. Además, con el anuncio de la salida del presidente en Junio próximo.
Ayer logró ganarle a Nacional Potosí que no presentó muchas armas para doblegar o por lo menos generarle algo de peligro al equipo albiverde. En una tarde calurosa, Oriente le ganó 2-0 con goles de sus dos delanteros, José Alí Meza y Maximiliano Freitas. La propuesta de Takeo en el primer tiempo de jugar con tres delanteros no funcionó. Los delanteros recibieron muy pocas veces el balón y tampoco hubo buena comunicación entre los tres (Meza, Bejarano y Freitas).
En el segundo tiempo el partido mejoró, Oriente mostró más compromiso en cada balón, aunque las chances seguían siendo escasas y el partido se convertía en monótono y aburrido. Los dos goles llegaron seguidos, Meza marcó el primero de penal y el segundo Freitas colocó el balón tras un gran pase de Lizio que entró enchufado, pegándole con la parte interna introduciendo el balón al lado derecho del portero. No hubo más emociones. Solamente la lesión de Meza que mantuvo al borde de los nervios al hincha Orientista. Los gestos de dolor del Venezolano hicieron que una ambulancia se lo lleve de urgencia a que le realicen estudios para descartar algo grave. Meza tuvo un golpe en el tobillo derecho, su recuperación tardará 3 días y lo más probable es que esté para la visita de Oriente contra Petrolero en Yacuiba.
