La situación en Oriente se hace cada vez más tensa. Oriente no gana hace tres fechas y la hinchada comienza a pedir que rueden cabezas. El conjunto albiverde no pudo nuevamente de local y empató a un gol Wilstermann que lo pasó por encima en planteamiento y ocasiones claras de gol.
Primer y segundo tiempo para el olvido. Si antes, se destacaba algo de Oriente en un solo tiempo, en el encuentro de ayer fue malo los 90′ minutos. El gol de Oriente llegó gracias a Yasmani Duk que estuvo atento posicionado dentro del área para cazar un grosero error de la defensa aviadora para solo empujarla de cabeza.
El segundo tiempo, Oriente fue peor. La imprecisión y la falta de compromiso para cerrar el encuentro le pasaron factura. El estratega aviador, Peña, vio que era necesario cambiar el planteamiento para buscar el empate y le resultó a cabalidad. Wilstermann marcó el empate con un gol de otro partido, porque el que se estaba desarrollando era muy malo y empató las cosas a los 81′ minutos del partido. Si al visitante le daban más tiempo para jugar, tranquilamente podría haberse llevado la victoria que hubiera sido aún más catastrófica, que un empate que lo sumerge en una situación brava al conjunto albiverde. Ahora se aleja cada vez más de los punteros que no paran de sumar puntos.
La situación en Oriente es preocupante, el ambiente entre la hinchada y la institución no es de las mejores. Los jugadores no están a la altura de un Oriente Petrolero, el Cuerpo Técnico no encuentra soluciones, sino más bien se mete en más problemas y la dirigencia es la principal apuntada por lo hinchas que con cada vez más fuerza le hacen saber, que no están conforme con su pobre gestión deportiva en los últimos años.
